Nuestra arqueóloga de cabecera, María José, nos llevó en esta ocasión al conjunto parque arqueológico de Alarcos – castillo de Calatrava la Vieja, un rincón a la vera del Guadiana y muy próximo a Ciudad Real que cuenta con numerosos y valiosos vestigios desde la Edad del Bronce hasta bien entrado el Medievo. Entre medias, hicimos una parada en la quesería Zacatena, también cargada de historia, donde pudimos degustar el queso producido con las ovejas que pastan en esta finca lindante con las tablas de Daimiel.
Disfrutamos y aprendimos de lo lindo, y es una pena que estas actuaciones, en las que se invirtieron no hace tanto grandes sumas de dinero, esfuerzo y muchas ilusiones no tengan la publicidad y el aprovechamiento que merecen.
Para los que no nos pudieron acompañar en esta ocasión, queda, como siempre, el reportaje fotográfico de Pilar: